VIAJE A SUIZA CON NIÑOS
Todos los años desde que mi hija menor cumplió 3 hago un viaje al
extranjero en verano con ellos. Me gusta que se acostumbren a aeropuertos,
estaciones, pero sobre todo a otros idiomas, culturas y que vean cosas
diferentes.
Este año escogimos Suiza que ha sido un destino que me ha sorprendido
ya que, si no te limitas a visitar las preciosas ciudades y organizas
excursiones a la montaña, resulta un viaje de lo más completo y entretenido
para los niños.
Hemos estado 6 noches, alquilando una casa a través de Airbnb en una
ubicación muy central y altamente recomendable – Engelberg (a 20’ de Lucerna).
Se trata de un pueblo enclavado en un precioso valle rodeado de montañas y
bosques impresionantes.
Os haré un esquema de lo visitado cada día por si os puede ser de
ayuda para vuestra planificación de viaje:
DÍA 1
Por la mañana decidimos subir al monte Titlis, en el mismo Engelberg.
Para ello cogimos un teleférico que asciende a 3.200 metros y disfrutamos
arriba de increíbles vistas de montañas nevadas y lagos y atravesamos un
vertiginoso puente colgante sobre un glaciar.
Tips: excursión apta para niños de cualquier edad. Precio del
teleférico + rotair (cabina en grupo que sube hasta la cima) bastante alto pero
merece la pena (380€ 2 adultos + 4 niños). La estación del teleférico se
encuentra fácilmente localizable en un extremo del pueblo.
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Puente colgante sobre glaciar en Monte Titlis |
Por la tarde fuimos a Lucerna, es una de las ciudades de Suiza que más
nos ha gustado. Tiene un casco antiguo medieval con fachadas pintadas que tiene
muchísimo encanto, dos puentes de madera muy característicos con pinturas
alegóricas y bastante ambiente… hasta que cierran las tiendas a las 18h o
18:30h. En general en todas las ciudades suizas visitadas el ambiente decae
mucho a partir de esa hora que coincide con su hora de cenar y recogida en
casa.
Tips: hacer fotos del río Aar desde los puentes al atardecer.
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Lucerna |
DÍA 2
Hoy hacemos la excursión que está a más distancia de Engelberg ya que
decidimos visitar las cataratas del Rin en la localidad de Schaffhausen (casi
2h de distancia en coche) y por la tarde parar de vuelta en Zurich.
Las cataratas del Rin son impresionantes, hay varias opciones para ver
los saltos de agua: pagar uno de los barcos que se acerca al salto de agua
(unos 10CFH por persona), entrar en el Castillo de Laufen y aproximarse desde
los miradores (difícil acceso en coche, aprox. 5CFH por persona) y no pagar
ningún extra (más que el parking, de eso no te libras) y ver las cataratas
desde cualquier barandilla o mirador fácilmente. Es un sitio llenísimo de
turistas y se aprovechan con los precios del agua y la comida.
Tips: es una excursión que gusta mucho a los niños. Es mejor llevar el
agua y bebidas de casa e incluso los bocadillos. Si no mejor comer en algún
pueblo cercano fuera de la zona de las cataratas. No hace falta pagar el barco
o el castillo para verlas bien.
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Cataratas del Rin |
Tras esta visita fuimos a Zurich. Después de haber visto Lucerna,
Zurich nos decepcionó un poco. Es una ciudad más grande, también bonita con
edificios imponentes. Una cosa curiosa y no sólo de Zurich es el baño en los
ríos: cientos de personas se dejan arrastrar por la corriente en el Rin y el
Aar cuyas aguas bajan cristalinas de la montaña en un espectáculo de color por
lo vistosos flotadores-bolsa que llevan.
DÍA 3
El tercer día lo dedicamos a visitar Interlaken. Es una localidad que
como su nombre indica, se encuentra entre dos grandes lagos, el Brienz y el
Thun y que ofrece varios miradores en altura para disfrutar de la vista de los
4 “cuatromiles”, las cimas más altas de esa zona de Suiza.
Hay varias opciones para subir a la montaña, nosotros optamos por un
tren cremallera que salva una pendiente de 48% en algo más de 10’ y te deja en
el mirador de Harder Kulm. Las vistas tanto de las montañas como de los lagos y
localidades de alrededor eran tan bonitas que dedicamos más de una hora a
disfrutarlas y hacernos fotos.
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Mirador de Harder Kuln |
Al bajar dimos un paseo por el pueblo de Interlaken, muy enfocado al
turismo, con muchas tiendas de souvenirs y heladerías, y luego nos acercamos al
pueblo de Brienz. Se trata de una localidad de veraneo para los Suizos situada
en el lago del mismo nombre, es pintoresca y bien cuidada, las vistas del lago
son preciosas y aprovechamos para meter los pies y refrescarnos.
Antes de volver a casa habíamos leído que en el pueblo de Meiringer
había dos cosas especiales: la pastelería que inventó los merengues y el
escenario de la muerte de Sherlock Holmes. El pueblo es muy temático en torno a
esas dos cosas y allí fuimos a merendar y dar una vuelta.
Tips: llegar a Meiringer antes de que cierren las tiendas y
pastelerías a las 18h. Comprar los souvenirs en Interlaken, más baratos que en
otras ciudades. Bañarse en el lago Brienz si os atrevéis.
DÍA 4
Para no perder la costumbre dedicamos la mañana a la montaña y los
paisajes y nos encaminamos hacia el monte Pilatus. Aquí sacamos un billete
combinado que tiene truco: subida en tren cremallera y bajada en teleférico,
con el problema de que una vez arriba nos dimos cuenta de que la subida es por
un pueblo, Alpnachstadt y la bajada por otro, Kriens, así que si dejas el coche
en un pueblo luego es realmente complicado volver al otro (trasbordos varios de
autobús y tren) por lo que uno de nosotros bajó de nuevo en tren para recoger
coche en Alpnachstadt e ir a recoger al resto a Kriens.
La subida al monte Pilatus la considero imprescindible en cualquier
viaje a Suiza. Se tarda unos 20’ en subir, una vez arriba hay bastantes
servicios, pero sobre todo vistas de lagos y cumbres si a ratos está despejado.
Además hay una atracción adicional, en una parada intermedia entre la
cima del Pilatus y el pueblo de Kriens accedes al tobogán de verano
(rodelbahn.ch) más largo de Suiza con 1,4 KM de bajada en una especie de
trineo, divertidísimo para niños y mayores y barato en comparación con otras actividades
(8CFH adultos y 7CFH niños). Aprovechamos la parada en el tobogán para hacer
picnic (en Suiza cualquier prado es el escenario perfecto para hacer picnic) y
tras el cambalache de bajada, recogida de coche etc. decidimos pasar la tarde
en Basilea.
Tips: imprescindible con niños el tobogán gigante. Si hay muchas
nubes en la cumbre esperar pacientemente porque en una hora puedes pasar por
las 4 estaciones. Subir y bajar en el mismo medio de transporte.
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Tobogán que aprovecha la pendiente del Pilatus |
Basilea nos gustó mucho. El Rin es un río tan espectacular que
hace cualquier ciudad bonita, también aquí lleno de bañistas. La ciudad tiene
un ayuntamiento de piedra roja muy original, mas de 200 fuentes de agua
potable, el basilisco por todas partes y bonitas fachadas.
DÍA 5
Hoy dedicamos el día entero a visitar Berna, no porque requiera más
tiempo que otras ciudades pero si porque después de tanto ajetreo nos apetece
un día tranquilo y fácil.
Berna es una ciudad preciosa. Tiene dos relojes- torre que hay que
ver, el edificio del parlamento (Confederación Helvética), muchas fuentes
también de agua potable y los famosos osos de Berna (muy cuestionado, están en
un foso junto al río Aar).
Os recomiendo asomaros al río desde una terraza mirador que hay
junto a la catedral. Y visitar el barrio de Matte, que es medieval. Pero lo que
mas os recomiendo es ¡integraros con los berneses y bañaros en el río! Es de
fácil acceso desde Freibad-Marzili (se puede acceder en coche o caminando desde
la estación a 15’). Se trata de una zona de baños con piscina y acceso al río
totalmente gratuita. Cuenta con unos cambiadores muy rudimentarios pero
suficientes y está hasta arriba de locales. Si os atrevéis a lanzaros al río
Aar dejaos llevar por la corriente una o dos escalerillas, ¡es toda una
experiencia y no estaréis solos! (niños a partir de 8-9 años)
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Bañistas en cualquier río de Suiza |
Hasta aquí el diario de nuestro viaje … espero que os sirva de
ayuda…
Otra información que considero relevante: las autopistas son
estupendas, hay unas infraestructuras brutales y si alquilas coche suizo los
peajes van incluidos. Eso si, la gasolina es carísima un 40% mas cara que en
España. Los supermercados que tienen el monopolio allí, Coop y Migros, también
son bastante caros, hay pocos Lidl pero os recomiendo buscarlos porque la
diferencia de precios es considerable.
Por supuesto cualquier parking es de
pago y se necesitan monedas, pero eso es similar a España.
Espero haber sido de ayuda y cualquier corrección o comentario
adicional será bienvenido.